Un
día en silencio
Ayer, 12 de
Marzo de 2014, hice mi primera experiencia en silencio y la verdad es
que he de reconocer que la noche anterior estaba un poco nervioso por
los comentarios que habían hecho mis compañeros los cuales habían
hecho la misma experiencia.
Mi día en
silencio fue muy normal ya que no soy una persona de muchas palabras,
pero lo que si me frustraba era no poder hacer comentarios cuando un
grupo de personas estaban charlando sobre algún tema, pero se podía
llevar perfectamente. La mañana para mi fue lo más bonito de
experimentar ya que yo soy una persona que se pone música para
caminar por la calle y al no poder caminar por la calle escuchando
música me puse a pensar en mis cosas: aclare muchas ideas, también
le di vueltas a un hobby, me fui a la biblioteca a curiosear los
libros que mas me llamaban la atención, etc. He de confesar que
cuando salí del instituto tuve que hacer una llamada por un motivo
familiar, pero esa fue la única vez que hable en todo el día de
manera voluntaria. Cuando llegue a mi casa a mis padres le hacia
mucha gracia que no pudiese hablar un un poco tonto también
pero yo estaba
decidido a seguir con la experiencia, al terminar de comer al no
poder sentarme delante del ordenador a ver una seria me fui a darle
un paseo a mi perro que en mi opinión nos sentó
a ambos porque
cuando llegamos lo primero que hicimos lo dos fue echarnos una siesta
y a partir de ese momento mi tarde fue muy normal, me puse a hacer
tarea, estudie un poco y ya cene.
Las sensaciones
que he sacado de esta experiencia son que no es malo estar un día
contigo mismo sin relacionarte con nadie ya que te pones a pensar,
aclaras tu ideas y siempre es bueno tener un día de reflexión para
ti y una día para ser ''libre'' y poder hacer lo que quieras, ya que
estar un día sin ningún agente externo que intervenga en tus
pensamientos relaja, por lo menos a mi me paso eso, fue un día muy
productivo y tranquilo.